Agricultura
Se afianza producción de fruta de dragón en Aguascalientes
Calvillo, Ags.- Al inicio de la pandemia el mercado para la fruta del dragón fue excelente, pero luego la gente fue más selectiva y comenzó a comprar los productos básicos para su alimentación, lo que provocó una baja en la exportación y venta del fruto.
A seis años de haber iniciado con el cultivo de pitahaya o fruta del dragón en Calvillo, Daniel López comenta que han tenido altibajos que les han permitido tener mejores resultados en el cultivo del fruto.
Luego del Covid, el productor de pitahaya espera que el mercado se regularice, que la fruta no sea consumida solo por un sector económico medio a alto, con un fruto que ayuda bastante para la salud.
Es una etapa de esperar a que el mercado abra y buscar darle valor agregado a la pitahaya, comenta el productor al reconocer que estos seis años de tener el cultivo, ya se tienen las variedades que se adaptaron al suelo y clima de la región, y se conoce el mercado.
“Fue un proceso de mucho aprendizaje. Es un cultivo que no tiene mucha información para su manejo. Lo que hemos aprendido a sido a prueba y error, y lleva un costo como todo aprendizaje”, agregó.
Las variedades que más se adaptaron en Aguascalientes fueron las de pulpa blanca y pulpa roja, que se han prestado más para su crecimiento y producción.
En Calvillo se tiene un clima cálido a seco, con rachas de mucho frío, pero gracias a la topografía del terreno donde se encuentran las pitahayas se ha logrado se que mantengan y se desarrollen, debido a que el aire frío tiende a bajar, lo que ocasiona que las plantas que se encuentran en el cerro se conserven bien.
También se ha tenido la experiencia que a la planta le pega mucho todo tipo de plagas, de chinches, de gusanos, hasta el barrenador ha sido un problema para el cultivo. Las hormigas chicatanas y arrieras, y que decir de los pájaros.
Para todo ello se han tenido soluciones que al momento se tienen controladas.
Actualmente se embolsa la fruta que se comienza a desarrollar, para luego cortar y llevar a la venta, esto por los altos requerimientos que está demando el mercado. De esta forma la fruta se protege de plagas y de los propios pájaros, para que se obtenga un producto sin daño y directo al mercado.
“Es una labor trabajosa, pero esperamos sea rentable, porque una o dos frutas que se dañe, se pierde un kilo de producción, por ser una fruta demasiado pesada”, dijo sobre el embolsado.